15/11/14

Bingo Reyna - Mi corazón es una guitarra (1969)

Buenas tardes amigazos del garage, vuelvo hoy, después de luengos momentos fuera del ordenador; para traerles a este man: Bingo Reyna. Seguro lo conocen porque ustedes son cultos, conocen de historia y aprecian la buena música. Características, todas, que descubro en el álbum que les comparto hoy.
Con todo, nobleza obliga – y el debido respeto a este, mi lugar en el mundo; exhorta – hacer una pequeña reseña sobre quién es este muchacho y qué hizo por la música que tanto amamos.
Bingo Reyna se inició con Jackie y los Ciclones. A la vera de versiones clásicas y descollantes estándares yanquis cosió su técnica musical hasta emigrar a  Beto y Los Huracanes (Beto, por si no lo sabías es el reverendo Cacho Castaña). Ahí desplegó la técnica del garaje y el fuzz. Luego, cuando comprendió que sus horizontes musicales se desarrollaban por otros lares, abandonó el concepto de banda y se hizo solista. Y le fue bastante bien, grabó varios discos hasta el 70. Todos con buenas versiones y correctas dosis de fuzz (cuánto te agradezco esto, Bingo). Después, con el advenimiento de la noche y los sicarios de la picana; Bingo se exilió en EEUU (no sé si será esa la mejor opción, friend).
Ya no volvió por esta tierra.
Ni siquiera sabemos si está vivo.
Una pena,
sería interesante saber más.

Con todo, amigazos, creo fundamental rescatar y difundir el gran trabajo que hizo este tipo por el desarrollo de la guitarra eléctrica en Argentina (técnicamente hablando, claro) y lo mucho que ayudó al género del rock en el país y el continente. Así que acá se los dejo para vuestro deleite, para que anochezcáis agitando un vaso de whisky y construyendo rebeldía. Bingo Reyna.