onces, ya lo saben, no es novedad. Pero no importa porque – presumiendo de soberbia infinita y desmedida – sé que Garagelatino es un lugar de continuas, frecuentes y variadas visitas al cual recurren los muchachos ávidos de garaje latino pero que, urgidos en el vaivén laboral, sumergidos en la patética-épica-dramática que es nuestra vida o, por qué no decirlo si es verdad , al fin de cuentas; por pura pereza y desgano, no revisan otros lares que ofrecen material como el de este blog (generalmente mejor presentado y comentado, ya saben que Wirtis solo pone frases vacuas para llenar el espacio, para silenciar mi cabeza, en realidad. Es más, nunca han pensado, al leer mis interminables y atiborradas entradas; que debo ser un pesado, verborrágico que nunca deja hablar a nadie, menos escuchar, que la única persona gramatical que conozco es YO o, si uso la tercera sigue siendo para referirme a mí mismo y que por eso caigo tan mal, tengo tan pocos amigos (pero tan pocos que el día que se festeja tal evento la pasé solo, encerrado y drogado para no entender, para acallar los fantasmas que se presentan puntuales, como los recuerdos, pero llenos de culpas y reproches, tantos que he alejado a todos los que me rodeaban) y los que por acá me charlan lo hacen sólo porque no tuvieron la mala suerte de verme la cara, mirarme los ojos – esquivos y gachos, siempre escondiendo – y soportarme refunfuñar ¿No lo han pensado? Bueno, piénsenlo. Al fin de cuentas: por algo estoy acá, por algo hago entradas con tanta frecuencia como ningún otro, por ciertos motivos paso horas frente al monitor, tecleando, fumando y con la música al palo, para no escuchar nada más que a mí. Y mi mundo, que es cierto, es un continuo derrumbe, pero no sé si ya me importa. Porque soy Miguel Wirtis, Wirtis, el buen Wirtis que aparece fantasma, irreconocible si lo vieras en la calle, con su traje careta y su vida patética; para traer algo de música. Que ni sé a dónde va. Ni sé quien lee todo esto que escribo. Ni sé si lo leen. Yo supongo que no. Porque nunca leo lo que escribe nadie. Jamás. Así soy. Solo hay una verdad, una manera de ver y hacer las cosas: Mi manera. O, ya alucinado de jalar keta, podría decir que hay tres manerasBien, por otro lado, les anuncio que habrá nuevo recital de Los Knacks, sí! Sí! Yo también estoy contento. Espero poder ir esta vez, aunque no sé, porque es el viernes 23 de setiembre, en Buenos Aires, a las 21 hrs, en el teatro EMPIRE H (Yrigoyen 1934) y yo estoy acá, el desértica Mendoza, trabajando. Qué vamos a hacer, es la triste vida del asalariado. Bueno mis bróders, de la banda no les digo mucho, sólo que trae una versión de The train kept a rolling genial, pero, más mejor, visiten el blog de Jerson y vean cómo se hace una entrada. Les dejo el disco: The Time Machine y este link para que vean data.




