Buenas noches mis estimados bróders del garaje. Hoy vengo, en este sábado de farra y arrabal, a traerles una magnífica banda, que, probablemente ya conozcan: Los Babys. Sí señor. Otra vez revisando esa inagotable fonoteca de garaje salvaje, beat constante y rock furioso que es Méjico. A mí me gusta mucho chusmear lo que en el continente se hace y se ha hecho. Es increíble descubrir la influencia de foráneos géneros, expresiones y ritmos mixturados con lo propio de nuestra América. Los Babys, responsables de la mejor versión que alguna vez se grabó de Ghost rider in the sky. Además de terribles artefactos punk y garageros como Sorpresa, sorpresa y El carcachito ( que el oyente avezado, va a descubrir es una versión) de Roberto Carlos. Todos acá, en el disco que te facilita Wirtis hoy. También hay hermosas canciones como La virgen negra, María nomás y Yo. Les confieso que no le había dado tanta pelota a Los Babys. Sí respetaba y escuchaba la excelente y, en extremo marihuanera, versión de Ghost riders in the sky. Pero no había prestado mucha más escucha. No obstante, un día de ocio y pasividad, me dije: Wirtis, tenés que buscar algo nuevo, emocionante, que despierte tu amodorrado corazón. Indeciso y confuso me puse a revisar mi discografía pletórica y abundante de Mp3, esa con la que cargo de R`n`R mis blogs y encontré este bello disco. Pensé, por qué no. Y lo eché a andar. Y me gustó. Un montón. Suponía que Los Babys era una banda meramente melódica, que, por puro azar y suerte, había grabado una gran versión de Ghost riders… pero no, no señor. La tremenda pieza de sicodelia y locura que hicieron con esa canción es solo uno de los puntos altos de una gran banda.
Los Babys.